Este es el primer taller que tuve durante la carrera, y me permitió explorar diferentes facetas del diseño, la electrónica y el arte.
Este fue el primer proyecto que realizamos, que consistía en tomar un ejercicio de electrónica llamado drawdio y llevarlo a otra faceta. Lo que decidimos fue llevar a cabo una instalación en la plaza de armas donde queríamos reunir a la gente para que interactuaran entre ellos de forma libre. Lo ideal es que pudiéramos juntar desconocidos y se tomaran de las manos para que el aparato funcionara y a través de esto generar un diálogo entre los participantes. El resultado y el proceso fueron bastante entretenidos, ya que, tuvimos que fabricar los elementos, instalarnos en la plaza de armas que trajo problemas, pero lo logramos, y además, la gente interactuó de buena forma, se acercaban a preguntarnos que era antes de instalarlo, e incluso cuando ya lo dejamos de forma libre vimos como algunas personas tomaban la iniciativa y ellos mismos le enseñaban a otras personas como funcionaba.
El segundo proyecto tenía relación con una visita que realizamos al museo precolombino, y debíamos inspirarnos en lo que nos llamara la atención para crear un dibujo (diseño) que pudiese ser serigrafiado con tinta conductora hecha a partir de grafito. Por lo que, nos basamos en ciertos pictogramas de algunas vasijas para crear una pareja de personajes de épocas antiguas que conectarían con la tecnología moderna.
El último proyecto comenzó siendo una polera que utilizando hilo conductor integraríamos un tipo de sintetizador para tocar música en vivo. Pero termino siendo una intervención en la que éramos viajeros espaciales que veníamos de un mundo futuro en el que la gente ya conectaba entre ellos mismos, y estaban sumidos en la materialidad y egoísmo. Por lo que, veníamos a advertirles sobre este futuro. Nuestra forma de comunicarnos eran cajas que contenían ciertos sonidos, ya que, como habíamos perdido la comunicación en nuestra sociedad, ya no podíamos hablar, solo nos comunicábamos con cajas de ruidos.
